Alma, corazón y vida:
A veces esta profesión te hace regalos maravillosos, que no tienen precio, como esta reseña de "El Rinconcito de Bey". Como es conseguir hacer sentir justo en la medida y en la forma en que querías que lo hiciesen tus lectores cuando escribías la historia. Y solo por eso, únicamente por eso, este oficio de juntar letras se convierte en magia. No hay nada más hermoso que el que tu trabajo produzca sentimientos tan cercanos y necesarios, tan vitales, tan únicos y sí, tan necesarios para andar el camino que nos ha tocado recorrer. Gracias Bey Acosta. No tengas la menor duda de que eres una GRAN MUJER DE AGUA. Grande, muy grande.
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